sábado, 10 de mayo de 2008

PANNA COTTA

Ahhh, la bella Italia, con su Coliseo, su torre inclinada de Pisa, sus góndolas y cómo no... su Panna Cotta!!
Y es de ahí de donde he vuelto, encantada al 50% entre sus monumentos -los de piedra y los de carne y hueso...- y su gastronomía (¿quién dijo que allí sólo comen macarrones con tomate?)
Entre tantos tagliatones, cavatellis, bigulis, raviolis y demás (productos con los que he llenado una mochila y he traído cual alijo de cocaína colombiana), destacamos ese postre tan fácil de hacer como rico al paladar y del cual pongo receta a continuación:
INGREDIENTES:
  • 1 1/2 vaso de leche
  • 1 vaso de nata
  • 1 vaina de vainilla
  • 4 cucharadas de azúcar
  • 5 hojas de gelatina
Para acompañar (en este caso una salsa de frutas pasas):
  • 10 orejones de albaricoque
  • 5 ciruelas pasas
  • Ron o brandy
ELABORACIÓN:
Poner en un cazo a cocer la leche con la nata y el azúcar. Abrir la vaina de vainilla por la mitad a lo largo y abrirla, extrayendo con el filo del cuchillo las semillas de la misma. Echar la vaina y las semillas al cazo con la leche y dejar que todo se cueza en conjunto.
Cuando la mezcla ya se ha calentado lo suficiente y la vainilla ya ha soltado todo su extracto, poner en remojo las hojas de gelatina durante 5 minutos. Una vez blanditas, escurrir y añadir al cazo mezclando bien hasta su completa disolución, y dejar que cueza todo en conjunto unos minutos más.
Disponer moldes individuales y, colando la mezcla, añadirla a dichos moldes, dejando que se enfríen hasta que cuaje la panna cotta.

Para la salsa de frutas pasas, poner en remojo con un poco de agua las ciruelas. Los orejones de albaricoque se han de poner en licor. Ambas cosas tienen que estar unas dos horas para que se hidraten bien.
Pasar por la batidora las frutas así como el agua de las ciruelas y el licor en el que maceraron los albaricoques hasta que quede una masa homogénea.
Desmoldar la panna cotta y servir acompañada de la salsa.
También se puede servir con chocolate, mermeladas, frutas... al gusto.

Esos puntitos negros que se ven en la superficie son las semillas de la vaina de vainilla que irremediablemente terminan en el fondo del molde, pero que es signo inequívoco de que la panna cotta se hizo con vainas reales, no con extractos artificiales. A tomar en cuenta para cuando pidáis este postre en algún restaurante.

2 Comments:

Julito said...

Joer Marta.
Vas a Italia.....¿y no me avisas?
Grrrrr.

Oye, la Panna Cotta ésta, espectacular eh? Ya sabes que no soy muy de dulces, pero este postre me ha cautivado de verdad.
Parece sencillo de hacer y su aspecto invita a morderlo, así que supongo que me atreveré con él.

Un besazo y sigue contándonos cosas de tu viaje.
;)

La Cocina de Cromoly said...

Pues cosa más fácil imposible, y está bueno de verdad!!!!